En Cannes este año, 2025, durante las sesiones de pantalla y eventos formales en la alfombra roja, Hideo Kojima, una figura del mundo de los videojuegos, llamó significativamente la atención. Como visionario en medios interactivos, el creador de Metal Gear Solid y Death Stranding, Kojima subió al escenario de Cannes para declarar que los videojuegos ya no se consideran una actividad marginal sino que han evolucionado hasta convertirse en una forma de arte completa. Junto al director alemán Fatih Akin, Kojima también destacó que a diferencia del cine, el desarrollo de la trama en los videojuegos depende de la libertad del jugador, lo que complica la creación de historias fluidas e inmersivas. Kojima destacó la importancia de las nuevas tecnologías, especialmente la inteligencia artificial, considerándolas herramientas para ser dominadas en lugar de temidas. Él cree que el futuro de la narración está en la colaboración entre los creadores y los jugadores, con un gran progreso por lograr aún.
Ser un personaje en un juego de Kojima es mejor que la Palma de Oro este año en Cannes.»
Ante una audiencia repleta (y visiblemente impresionada), Hideo Kojima presentó algunos vistazos de Death Stranding 2, su próximo proyecto. A su lado estaba Fatih Akin, el reputado cineasta alemán conocido por » Head-On «, » The Edge of Heaven » y » The Golden Glove «. Akin, quien parecía tanto un fan entusiasta como un colaborador inspirado, interpretará a un personaje llamado Dolman. Este accesorio viviente y hablador está literalmente adherido a la espalda del héroe, Sam Porter Bridges. Como Kojima bromeó, «Al principio, Sam se lo pega en el trasero, lo que molesta mucho a Dolman». Sin embargo, Dolman sirve más que solo para efecto cómico: habla, comenta y alerta. En el refugio de Sam, discute desde una estantería mientras el héroe descansa, y en el campo, puede ser desplegado como un radar viviente. Kojima ya lo ve como un personaje de culto. La idea es típicamente kojimiesca: extraña, divertida y probablemente emocionante.
En el universo de los videojuegos, los compañeros de viaje tienen un papel crucial tanto en el desarrollo narrativo como en la inmersión del jugador. Dolman, el personaje distintivo de Death Stranding, resuena claramente con Mimir, la cabeza parlante presente en God of War. Ambos personajes enriquecen sus respectivos juegos gracias a su presencia única, cada uno contribuyendo de forma diferente —uno representa la integración tecnológica avanzada y el otro encarna las tradiciones antiguas del relato—. Esta comparación subraya la importancia de los compañeros en los videojuegos para enriquecer la profundidad narrativa y la calidad de la historia.
En la actualidad, en relación con la narrativa de los videojuegos, Fatih Akin describe su insuficiencia: «Todos decimos que venimos a Cannes para soñar con la Palma de Oro. Pero interpretar un personaje en un juego de Kojima… es incluso mejor», dice entre risas y aplausos. Una vez más, Hideo Kojima expresa su deseo de acercar los videojuegos al cine, aspirando a la mejor fusión de arte interactiva y narración cinematográfica. Luego ofrece una análisis perspicaz (y muy lúcido) sobre las limitaciones de la narrativa en los videojuegos. «Todos dicen que soy un narrador. Pero no creo haber tenido éxito aún», admite Kojima. ¿Por qué? Porque los videojuegos son inherentemente interactivos. A diferencia del cine, donde el autor controla el ritmo, los jugadores deciden el ritmo, las opciones y los rodeos. Kojima lo compara con una autopista: «El jugador puede cambiar de carril, tomar un desvío o incluso conducir hacia atrás». También menciona un ejemplo divertido: «Si hago un juego donde el jugador tiene que subir al escenario en Cannes, puede que nunca llegue allí. O si lo hace, será demasiado tarde. ¿Implemento un Game Over? ¿O una cinemática que les obligue a venir? Esta dilemma está en el corazón del problema narrativo de los videojuegos».
En el Festival de Cine de Cannes de 2025, el renombrado creador de videojuegos Hideo Kojima, conocido por Metal Gear Solid y Death Stranding, reconoció que los videojuegos son ahora considerados una forma completa de arte, no simplemente un pasatiempo marginal. Destacó los desafíos únicos en la narración de juegos en comparación con el cine, donde la libertad del jugador complica la historia pero también la enriquece a través de la inmersión. Kojima resaltó el potencial de la inteligencia artificial y la creación colaborativa con los jugadores como elementos clave para futuros avances en la narración.Kojima presentó un avance de Death Stranding 2 junto al director alemán Fatih Akin, quien interpretará a Dolman, un accesorio vivo adjunto a la espalda del jugador en el juego. Dolman serves both comic relief and practical utility as a commentator, radar, and companion, similar to Mimir from God of War. Akin expresó su admiración por el enfoque innovador de Kojima en la narración, stating that being part of a Kojima game surpasses winning the Palme d’Or at Cannes.Kojima acknowledged the current limitations in video game narratives due to their interactive nature. Unlike films, where authors control pacing and plot, gamers make choices influencing the story’s progression, presenting a unique challenge for creators. He likened this to driving on a highway with multiple possible routes, illustrating how developers must balance player agency with coherent storytelling. Kojima’s analysis underscores the ongoing quest to blend cinematic narration with interactive art in video games.Kojima admits that for now, storytelling in games remains semi-guided, often tied to cutscenes that «recalibrate» the player’s experience. He dreams of truly free storytelling but acknowledges that technology and perhaps creators’ thinking are not yet ready for such an evolution. «It’s not satisfactory yet,» he stated. «I want the next generation to invent what I currently cannot.» Perhaps with the help of artificial intelligence?
«La IA no es un enemigo sino una ayuda valiosa.» Este tema fue discutido durante un panel en el Festival de Cine de Cannes, donde dos artistas expresaron su openness hacia el uso de esta nueva tecnología. «La IA es similar a los coches cuando aparecieron; todos tenían miedo. Hoy, simplemente es una herramienta eficiente», afirmó uno de ellos. «Los creadores deben usar la IA para mejorar la creatividad en lugar de externalizar todo.» Este mensaje estaba dirigido específicamente a aquellos que ven la inteligencia artificial como una amenaza al arte.Antes de concluir su presentación, Hideo Kojima hizo un emotivo llamado: «Sé que hay personas que crecieron con los videojuegos y ahora son escritores, músicos, cineastas. Les pido que me ayuden a evolucionar el medio. Para inventar la narración interactiva del futuro.» Kojima reconoce que la revolución de mañana no puede ocurrir sin el apoyo de una nueva generación criada en los videojuegos y equipada con estas nuevas herramientas como la IA. Cre.