Codemasters, famoso por su experiencia en juegos de carreras durante casi tres décadas, está pasando por un período de despidos. Esta decisión se anunció tras el fin oficial de su asociación con el Campeonato Mundial de Rally (WRC) y la suspensión del desarrollo futuro de juegos de rally. Como resultado, se han informado despidos confirmados a nuestros colegas de VGC, mientras que el estudio británico declara su intención de «reducir ciertas posiciones», reasignando tantos colaboradores como sea posible a otras divisiones dentro de EA Sports; Codemasters ha sido propiedad de Electronic Arts desde 2021. Está claro que Codemasters está avanzando desde una parte significativa de su historia. Fundado en la década de 1980, el estudio se convirtió en una referencia indiscutible en los juegos de carreras, especialmente en rally, con títulos como Colin McRae Rally (1998) y las series DiRT y WRC. Hoy, este largo viaje llega a su fin tranquilamente, con un comunicado que simplemente señala el «final del camino».
Esta decisión se alinea con una reestructuración más amplia en Electronic Arts, ya que el editor estadounidense recently anunció grandes recortes de personal que podrían afectar a hasta 400 empleados. La adquisición de Codemasters por $1.2 mil millones en 2021 vio a EA prometiendo crear un «líder mundial en entretenimiento automovilístico», capaz de ofrecer «nuevas experiencias de carreras cada año». Esta adquisición otorgó a EA acceso a las licencias de F1, WRC, GRID, DiRT y Project CARS, complementando franquicias existentes como Need for Speed y Burnout. La visión parecía ambiciosa, casi demasiado buena para ser verdad.
Dos años después, la situación es significativamente diferente. En 2022, el equipo de DiRT 5 ya había sido integrado en Criterion Games para apoyar la producción de Need for Speed. Según ciertas fuentes, tras el reciente lanzamiento de F1 23, se indica que los últimos títulos de Fórmula Uno y Campeonato Mundial de Rally han tenido un rendimiento comercial menor, contribuyendo a presiones internas dentro de la empresa. Los despidos inminentes, whose exact number remains to be determined, no sólo significan una partida de prácticas pasadas sino también un cambio estratégico significativo. Si Electronic Arts planea orientar Codemasters hacia otros proyectos más en línea con las métricas de rendimiento esperadas por la corporación, marca el cierre de una etapa importante en la historia de los videojuegos.